viernes, 28 de septiembre de 2012

Tres Hombres que Caminan

Hoy es cumpleaños de mi amigo, y por algún extraño capricho de esos que me surgen siempre, a veces tan extraños y a veces tan simples he decidido este año no felicitar a nadie por su natalicio (dice Benedetti felicitarte por tu cumpleaños seria tan injusto con tus cumple días y añado yo, sería también tan injusto con tus cumple horas) pero la necesidad de expresar mi admiración, cariño y respeto hacia mis amigos (varones, de mis amigas hablare posteriormente) que son cuatro y no son uno, me lleva a hablar de tres por petición de fuerzas superiores y por consejo de sabias voluntades:

Dos hombres caminando
en faena ardua e impaciente
de llegar a algún lugar
conocieronse hablando
a su vez con un extraño
que gustaba de cantar,
presentaronse con nombres
algo raros e importantes
de dos tipos que hace años
eran del mundo gobernantes,
el tercero había creído
que el camino aburrido
era mejor compartir,
la distancia entre los pasos
dependiendo de la charla
se hacían cortos
o se hacían largos
unas veces bajo lluvia
y otras veces bajo sol
cada uno
su propia historia contó,
a sabiendas de sus fuerzas
cada uno hacia de guía
según él mismo conocía
las rocas de su tierra,
nadie nunca preguntaba
hacia donde el otro dirigía
con nostalgia la mirada
porque ya todos sabían,
pero entonces con los años
olividaronse los nombres
y por vergüenza a preguntar
dejaron de llamarse
según su fe
e inventaron un apodo
¿apropiado?… muy poco
pero fácil de recordar
y dirigiéndose uno al otro
se decían:
Amigo que bueno es caminar contigo.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

La Canción del Samurai. Robert Pinsky

Cuando no tuve techo hice
De la audacia mi techo. Cuando no tuve
cena mis ojos cenaron.
Cuando no tuve ojos oí.
Cuando no tuve oídos pensé.
Cuando no tuve pensamientos esperé.
Cuando no tuve un padre hice
del cuidado mi padre. Cuando
no tuve una madre abracé el orden.
Cuando no tuve amigo hice
del silencio mi amigo. Cuando no tuve
enemigo opuse mi cuerpo.

Cuando no tuve templo hice
de mi voz mi templo. No tengo
sacerdote, mi lengua es mi coro.

Cuando no tengo medios, la fortuna:
mis medios. Cuando no tenga
nada, la muerte: mi fortuna.

La necesidad es mi táctica, el desapego
es mi estrategia. Cuando no tuve
amante, cortejé a mi sueño.

sábado, 15 de septiembre de 2012

RituallautiR

Reproduce los tres videos de forma independiente en el orden en el que aparecen.





jueves, 13 de septiembre de 2012

Alyssa Monks

La pintora estadounidense Alyssa Monks, con solo 35 años, es considerada una de las artistas más realistas de la plástica contemporánea por su perfección a la hora de plasmar la piel bajo efectos del vapor, el agua y el vidrio. La graduada en Artes de varias universidades de Nueva York y con estudios en Florencia, Italia, maneja de tal forma el óleo que la mayoría de sus obras parecen fotografías tomadas al interior de una ducha vaporosa y otras simplemente vivos retratos. Ha expuesto en Alemania, Grecia, Australia, St. Barths y en las ciudades más importantes de Estados Unidos. No en vano, ha sido profesora de Pintura de la piel en el New York Academy of Art, así como en la universidad de Montclair State y en la Academia de Finas Artes Lyme.














miércoles, 12 de septiembre de 2012

Soneto del Hombre Sorprendido


Que exquisita sangre  envuelve tu vida
Que maravilla tenerte entre  nosotros
Que perfecto estandarte de rostros 
Que angustia el no saber  tu guarida 

La mar y el cielo parecen despojos 
De tus ojos las miradas  liquidan 
A  las artes de viejos maestros
A los versos que a ti se dedican

Quien pudiera saber a su antojo
las palabras que evitan  la muerte
De tu tallado marmoleo embrujo

Do procede tu alma, tu suerte
De las altas riquezas que esconden
Tus labios, tus manos, tu vientre

lunes, 3 de septiembre de 2012

Espero Curarme de ti. Jaime Sabines

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de
fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible.
Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me
receto tiempo, abstinencia, soledad.

¿Te parece bien que te quiera nada más una semana?
No es mucho, mi es poco, es bastante. En una
semana se pueden reunir todas las palabras de amor
que se han pronunciado sobre la tierra y se les
puede prender fuego. Te voy a calentar con esa
hoguera del amor quemado. Y también el silencio.
Porque las mejores palabras del amor están están entre dos
gentes que no se dicen nada.

Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y
subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que
te quiero cuando digo: "qué calor hace", "dame
agua", "¿sabes manejar?,"se hizo de noche"... Entre
las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he
dicho "ya es tarde", y tú sabías que decía "te
quiero".)

Una semana más para reunir todo el amor del
tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que tú
quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No
sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para
entender las cosas. Porque esto es muy parecido a
estar saliendo de un manicomio para entrar a un
panteón.

Ella y el Tiempo/Hombre que mira a una muchacha. Benedetti


“Por favor” la voz de suplica sonó al instante patética; no fue esa frase de convicción de cuando se ordena amablemente y a la cual estoy acostumbrado, como cuando digo: Llámame mañana por la tarde      ó       Dame agua*
Si, debo aceptarlo, me derrumbe, terriblemente, estrepitosamente, entré en pánico, por breves instantes sentí que lo perdía todo aún cuando nunca lo he tenido y es que un rechazo más habría de cimbrar lo que hasta ahora considero como la realidad misma: que un hombre puede conseguir cualquier cosa que se proponga siempre y cuando lo intente con todas las fuerzas de su espíritu, considerando al espíritu como la sincronización  perfecta de corazón y razón, es decir de amor y sabiduría.

La frase completa causó indignación tanto a mi como a mi fiel escudero que atento escuchaba la conversación: “Por favor (que pronuncie con un tono tembloroso y suplicante) seria bueno que saliéramos” al instante los demonios de la vergüenza y el arrepentimiento pusieron su casa en mi existencia, ¡Cómo es que yo  había pronunciado tal sentencia! ¡Yo, otrora verdugo y ahora condenado! Ella noto mi caída, su voz cambió,  con un aire indulgente me permitió mitigar mi sed de aspiración con un par de gotas de esperanza al decirme que esperara su respuesta mañana.

¡AH MAÑANA! nuevamente El Tiempo, la sucesión de hechos, la sustancia de la vida...y tal vez la vida misma, de verdad me gustaría que no fueras tan importante (y debo hacer notar que aquí cambia y combina la forma de la narración) y repito ¡Como me gustaría que no fueras para mi tan importante! Y es que tu imagen me domina de forma tan brutal que es imposible escapar de ti.

Alguien pregunta: ¿De quien reniegas de Ella o del Tiempo?

Y yo respondo: ¿Y es que acaso no son los dos la misma cosa?


HOMBRE QUE MIRA A UNA MUCHACHA. M. BENEDETTI
Para que nunca haya mal entendidos
Para que nada se interponga
Voy a explicarte lo que mi amor convoca
Tus ojos que se caen de desconcierto
Y otras veces se alzan penetrantes y tibios
Tienen tanta importancia que yo mismo me asombro
Tus lindas manos mágicas
Que te expresan a veces mejor que las palabras
Tan importantes son que no oso tocarlas
Y si un día las toco es solamente para retransmitirte ciertas claves
Tu cuerpo pendular que duda en recibirse o entregarse
Y es tan joven que enseña a pesar tuyo
Es un dato del cual me faltan datos
Y sin embargo ayudo a conocerlo
Tus labios puestos en el entusiasmo
Que dibuja palabras y promete promesas
Son en tu imagen para mi los héroes
Y son también el ángel enemigo
En mi amor estas toda o casi toda
Me faltan cifras pero las calculo
Me faltan indicios pero los descubro
Sin embargo en mi amor hay otras cosas
por ejemplo los sueños con que muevo la tierra
La pobre lucha que libre y libramos
Los buenos odios esos que ennoblecen
El dialogo constante con mi gente
La pregunta punzante que me hicieron
Las respuestas veraces que no di
En mi amor hay también corajes varios
Y un miedo que a menudo los resume
Hay hombres como yo que miran tras las rejas
A una muchacha que podría ser vos
En mi amor hay faena y hay descanso
Sencillas recompensas y complejos castigos
Hay dos o tres mujeres que forman tu prehistoria
Y hay muchos años demasiados años
De inventar alegrías y creerlas después a pie juntillas
Querría que en mi amor vieras todo eso
Y que vos muchachita con paciencia y cautela
Sin herirme ni herirte
Rescataras de ahí la luna, el río
Los emblemas rituales,
Los proyectos de besos o de adioses
El corazón que aguarda pese a todo.


* Espero Curarme de ti. Jaime Sabines (Dame Agua)